El monitoreo, evaluación y aprendizaje (también conocido como M, E & L, por sus siglas en inglés) se ha transformado en una herramienta cada vez más importante para medir el impacto de las organizaciones. Esta herramienta ayuda a las organizaciones a mejorar sus programas e iniciativas económicas, sociales y ambientales – los resultados de triple impacto – mediante la recopilación y el análisis riguroso y sistemático de datos.

Es significativo notar que MEL se puede utilizar en muchos ámbitos en los que las organizaciones despliegan su quehacer, incluidos los programas de subvenciones, la adaptación al cambio climático y e apoyo a las comunidades.
Como sus siglas lo indican, MEL se estructura a partir de tres componentes fundamentales:

1.- Monitoreo: consiste en la recopilación y el análisis sistemáticos y continuos de datos para proporcionar a la dirección y a otras partes interesadas indicaciones sobre el grado de avance de la ejecución, el logro de los resultados previstos, la aparición de resultados no previstos, el uso de los fondos asignados y otra información importante relacionada con la intervención y el contexto.

2.-Evaluación: es la medición sistemática y objetiva de un proyecto, programa o política en curso o finalizado, su diseño, ejecución y resultados. El propósito de la evaluación es proporcionar información creíble, fiable y útil, que permita la incorporación oportuna de los hallazgos, las recomendaciones y las lecciones aprendidas en los procesos de toma de decisiones pertinentes.

3.-Aprendizaje: es el proceso intencional de generar, capturar, compartir y analizar información y conocimientos de una amplia gama de fuentes para fundamentar las decisiones y adaptar los programas para que sean más eficaces. La información recogida en el marco del seguimiento y la evaluación y otros procesos aporta mucho aprendizaje. Este aprendizaje – si se institucionaliza y se incorpora en las intervenciones en curso y futuras – contribuye a fortalecer el diseño, los procesos, las normas y las estrategias operativas del programa. Un MEL bien alineado con los objetivos estratégicos de las organizaciones les permite a éstas:

-Precisar sus objetivos: ayuda a las organizaciones a comprender mejor lo que quieren lograr.
-Una implementación eficaz: ayuda a las organizaciones a garantizar que sus programas funcionen según lo previsto.
-Incrementar la efectividad del programa: ayuda a las organizaciones a mejorar el impacto de sus programas
-Promover un aprendizaje continuo: ayuda a las organizaciones a aprender de sus experiencias y adaptarse a las circunstancias cambiantes.

Inspirados por esta herramienta, en Triple Impacto ayudamos a nuestros clientes a mejorar su impacto económico, social y ambiental. A través de MEL, construimos un sistema integral diseñado para recopilar, analizar y utilizar sistemáticamente datos para mejorar el rendimiento, alcanzar objetivos clave y fomentar el aprendizaje continuo.

Nuestro enfoque se adapta a las necesidades de nuestros clientes, priorizando la toma de decisiones basada en datos e impulsa un progreso significativo en todas las iniciativas o proyectos que despliegan las organizaciones con las que colaboramos.

Malik Fercovic

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